Este libro es impactante. Desnuda las maneras que usa la industria alimentaria para vender sus productos ultraprocesados y expone los efectos nocivos para nuestra salud. La comida chatarra nos enferma. Los chicos son los más vulnerables ya que esta industria los manipula para que se encandilen con envases marketineros y con alimentos rebalsados de azúcar. ¿Qué comemos hoy? colorantes, ingredientes químicos, sal y azúcar. Pan con textura, forma y aroma del pan, pero que ya no es pan: ahora es un compuesto que lleva 25 ingredientes químicos. Y así con todos los alimentos. Los conflictos de intereses y la falta de intención política hacen que en Argentina no se logre avanzar en la protección al consumidor, como sí sucede ya en Chile, con medidas concretas como sellar cada producto evidenciando las mentiras que sostienen desde sus envases. El invento del "snack", el comer entre horas, es sostenido por muchos médicos que en realidad avalan las necesidades de venta de esta industria. Hay complicidad desde representantes de la ciencia. ¿Qué hacer? Volver a la comida casera, a las frutas y a las verduras. El libro le llevó a la periodista varios años de escritura, investigación y muchos viajes por países de Latinoamérica.
Florencia Lampreabe, diputada nacional por el Frente de Todos, dialogó con FM LA PATRIADA sobre Ley de Etiquetado Frontal: "La ley es una herramienta de salud publica para decidir con información.", "Consumimos un montón de productos ultra procesados con nutrientes críticos de los que abusa la industria.", "Esta ley de promoción de la alimentación saludable además de las etiquetas con sellos octogonales de advertencia, prohíbe la publicidad engañosa.", "La ley regula que sellos de advertencia no pueden ser vendidos ni patrocinados en las escuelas.", "Las papas fritas no van a poder tener la imagen de Messi.", "Lo que regula la ley son la mayoría de los producto envasados presentados en góndolas.", "Cuando hay octógono negro no puede haber ni juguetes ni dibujos infantiles.", "Hay una prórroga de adecuación de 2 años para adecuarse a esta normativa.", "Hubo resistencias por eso llamamos a la ciudadanía a informarse."